¿Alguna vez te has parado a pensar cuánto nos parecemos a los árboles? ¡Es sorprendente! Nuestros brazos pueden ser las ramas y nuestros pies las raíces. Pero hay mucho más. Hay similitudes en nuestra anatomía, en nuestro funcionamiento individual e, incluso, en nuestro comportamiento colectivo. Los niños y niñas aprenden en este álbum infantil no sólo los parecidos con nuestros hermanos arbóreos sino también la necesidad de cuidarlos. ¡Sé un árbol porque juntos somos un bosque! 

La autora Maria Gianferrari realiza un alegato en favor de la naturaleza. Escribe un texto lírico que actúa a modo de álbum y aproxima a los jóvenes lectores al conocimiento de los árboles y la importancia de su cuidado. Las últimas páginas reúnen una carta de la autora, una descripción anatómica del árbol y propuestas de acción para ayudar al medio ambiente.  

Este álbum cuenta con las coloridas ilustraciones de Felicita Sala. El desplegable ilustrado de su interior ayuda a comprender los grandes parecidos entre humanos y árboles.  

El prestigioso naturalista, periodista y escritor Joaquín Araújo escribe el epílogo.