Bruce Wayne y Selina Kyle al fin se disponen a contraer matrimonio, pero no bajo sus identidades civiles, sino como Batman y Catwoman. ¿Algo puede salir mal? Bien, pues... para empezar, Booster Gold parece empeñado en hacer realidad un viejo dicho sobre las buenas intenciones cuando decide obsequiar a Bruce con un regalo insólito, relacionado —como no podía ser de otra forma— con sus especiales dones de viajero temporal. El auténtico infierno resultante no solo podría dar al traste con el acontecimiento, sino también con la existencia misma del Universo DC tal y como lo conocemos. Por otro lado, ¿quién iba a postularse como padrino, sino el Joker? El Príncipe Payaso del Crimen está tan ansioso por arrogarse el título que amenaza con provocar un funeral (o varios) incluso antes de la ceremonia. Y cuando esta llegue a celebrarse, si es posible, ¿qué implicará para el futuro de dos héroes de Gotham cuya extraordinaria historia de amor ya ha cautivado a generaciones enteras de lectores

Ante la inminencia del enlace entre la Felina Fatal y el Caballero Oscuro, Tom King cuenta de nuevo con uno de los dibujantes más prolíficos de la reciente trayectoria de Batman, Tony S. Daniel, para el sorpresivo relato de paradojas espacio-temporales titulado El regalo. En El padrino asistimos al regreso de Mikel Janín, quien precisamente ha acompañado a King en buena parte de su etapa... y también lo hace en el último de los seis episodios recogidos en este tomo, el especial núm. 50 de la serie americana Batman, en el que, junto a otros de los mejores artistas de DC —como José Luis García-López, Neal Adams, Tim Sale y Jim Lee—, celebra la inesperada culminación de esta gran trama nupcial.